
Si los gayones fuéramos invitados a el acto del 12 de octubre mas o memos esto es lo que diríamos:
Hablar del 12 de octubre es hablar de las costumbres que nos condiciono la historia oficial que según Galeano "miente más por lo que calla que por lo que dice".
Hablar del 12 de octubre es hablar de ese educación que repite las mentiras de los libros sin detenerse siquiera a pensar cual será la versión de los conquistados, más cuando estos no fueron exterminados.
Muy a pesar de la mentira ahora sabemos que la llegada de Colón inicio el genocidio más grande de la historia de la humanidad, 70 millones de seres humanos fueron exterminados. Pero aún así, existen pueblos aborígenes en lo que hoy conocemos como América.
La expedición financiada por el naciente imperio español abrió las puertas al gran comercio de africanos esclavos, en sólo los siglos XVI y XVII 12 millones de mujeres, hombres y niños fueron vendidos como esclavos por portugueses, ingleses y españoles, y por cada uno de los que logró llegar a este continente desde el África madre murió uno en el camino, hablamos entonces de 24 millones de seres que sufrieron los embates del comercio humano que se inicio con la llamada conquista y que duro mucho más de lo que nombra el dato histórico.
Podemos entonces decir que la mal llamada conquista iniciada con el mal llamado descubrimiento destruyó la vida de cerca de 100 millones de seres humanos. Jamás otra fecha histórica llevara a cuestas tamaña barbaridad. Y todo esto para saciar la acumulación primaria de riquezas que la Europa civilizada requería para que se estableciera el régimen social más tenebroso que civilización alguna allá conocido: el capitalismo.
Por todo ello haciendo honor a la verdad histórica hay que recordar la palabra indígena que reafirma la posición de resistencia de la patria de Bolívar, “ana karina roto aunicom paparoto itoto manto”, “somos caribes vengan ver morir a los hombres libres”, o para decirlo en el idioma de estas tierras, el de la palabra de los guerreros gayones Laurí gayon kinyivi iu-yüsh (somos hermanos vamos valientes).
Juan Chakuina.